Seguro que, en muchas ocasiones, has escuchado hablar de razas peligrosas de perro. ¿Esto es real? ¿Existen ejemplares que, por el simple hecho de pertenecer a una raza concreta, son más peligrosos que otros? Lo cierto es que no. ¡Y en L’Argenteria te contamos el motivo!
Antes de nada, sí podemos destacar que existen algunas razas que, genéticamente, tiendan más a la agresividad. Sin embargo, esto ocurre con cientos de características distintas. Hay razas más amables con los niños, otras más juguetonas, otras más cariñosas… Y, por supuesto, simplemente es una predisposición genética. ¡Pero eso no influye en la forma de ser final del pero!
De hecho, lo que puede fomentar o cambiar la actitud de un perro es la educación que reciba de sus dueños. Si un perro, sea de la raza que sea, está bien educado, jamás será peligroso. Lo mismo ocurrirá con razas no consideradas peligrosas. Si la educación que recibe el perro no es la correcta, por supuesto podría llegar a atacar a alguien. ¡Todo depende de la educación y el cariño con el que se les trata!