Podríamos decir que la fontanela de los chihuahuas es una parte más de su cuerpo. En general, una fontanela es una especie de apertura o agujero en el cráneo que deja “entrever” las zonas blandas del cerebro. Podemos encontrar fontanelas en bebés recién nacidos y también en animales, como el perro. Esto es algo habitual en los primeros meses de edad, ya que el cráneo todavía está formándose y, por ende, cerrándose.
Este agujero se da cuando las zonas del cráneo no se han unido correctamente y, aunque puede ocasionar algunos daños, en otros casos puede ser totalmente normal. Ese es el caso del chihuahua, quien cuenta con una fontanela durante una parte de su vida. De hecho, se tiene constancia de que la fontanela de los chihuahuas se ha ido formando con el paso de los años porque la cabeza amanzanada de esta raza suponía un problema para la hembra en el momento del parto. Por ello, la cabeza del chihuahua adopta diversas formas que facilitan el parto. ¡Ya es un rasgo más de la raza!
No obstante, si observas que tu perro tiene una fontanela, lo más indicado siempre será acudir a tu veterinario de confianza. Sólo él puede asegurarte si se trata de algo normal en su raza y con su edad o si, por el contrario, es parte de alguna patología.